Un liderazgo desquiciado en un mundo globalizado
Por LGP Columnista del Servicio Panamericano de Noticias
El periodismo internacional es un buen catalizador para
medir la capacidad del liderazgo mundial en una sociedad globalizada.
Juegos
de Guerra. Así llamó recientemente
Vladimir Putin, el presidente ruso a los ejercicios militares conjuntos, de Rusia y China.
Porqué el gobernante ruso llama (juego de guerra), porque
con la exhibición de armamentos de guerra de última generación busca demostrar
que Rusia, es la nación en el mundo de
hoy pionera, en armamentismo bélico.
Y ahí surge la pregunta sobre papel de la China
continental en ese ejercicio militar. ¿Cuál de las dos naciones de China o
Rusia, tiene más personal militar, más capacidad armamentista y más dinero para
invertir en una eventual guerra entre grandes potencias? La respuesta aflora
espontánea, China, es la que cuenta con mayores recursos, después de los
Estados Unidos.
 |
| Ejercito ruso renovó armamento |
XI Jianping, el presidente de China, se mostró complacido con los ejercicios
conjuntos, y Putin satisfecho de haber enviado un mensaje claro a Washington.
A raíz de esa exhibición militar, el Pentágono abrió los
ojos y se puso cauteloso, hasta el extremo,
de que las Fuerza Aérea estadounidense pidió ampliar su matrícula en 40
mil nuevos reclutas, con el propósito deliberado, de quedar por encima de los dos grandes belicistas
como lo son Pekín y Moscú.
Donald Trump, el presidente norteamericano, conservador,
derechista, capitalista y negociante, es más belicista, que Putin y Jiampin.
En el momento en que se escribe este comentario hay un
cruce de mensaje sobre el efecto devastador de la guerra comercial entre
Estados Unidos y la China continental.
Por un lado, Washington anuncia, la imposición de 200 mil millones de dólares a
los productos chinos que serán obligados a pagar un arancel de un 10%.
Pekín responde de inmediato con un arancel tenue de sólo
60 mil millones, pero los planes de
China, están bien definidos y van a ir aumentando los
aranceles al compás de lo que ocurra en las aduanas estadounidenses.
 |
| Las tres grandes potencias armamentistas. Estados Unidos la lidera |
Esta guerra comercial que ya afecta a Rusia, a Europa, a
China y Estados Unidos como es natural, podría extenderse a todo el planeta, porque no olvidemos, que el mundo del siglo XXI es globalizado, y las teorías y las disputas entre las
naciones beligerantes afectan directamente a toda la humanidad.
En el siglo XX las disputas comerciales, ideológicas o
territoriales, se dirimían a través de
los símbolos occidentales de la democracia o de los símbolos del comunismo internacional,
del socialismo democrático, o de las teorías marxistas-leninistas.
Actualmente solo existe una ideología, (capitalismo
globalizado) y la nación que no se acoja al nuevo sistema queda fuera del
escenario mundial.
Los continentes que conforman la geografía mundial están
conscientes de esta realidad y ni siquiera se discuten otras teorías. Salvo la
de los terroristas islámicos en naciones del Medio Oriente, y en países
como Pakistán, Afganistán, Siria, Turquía, Palestina, y en Corea del Norte, que todavía continúa
bajo la égida de comunismo nacionalista que se regodea en personalidad de su
dictador Kin Jong In.
El continente europeo es un gran laboratorio de la globalización,
y sus 28 miembros se adaptaron rápidamente a los nuevos tiempos. Allí se
discute parlamentariamente lo que más conviene a la Mancomunidad.
Un detalle que no quiero dejar pasar en este artículo de
opinión, es la discolaridad del
liderazgo gubernamental en las principales naciones del mundo. Hay algunos que
llegan a la locura, como es el caso de Donald Trump. Nicolás Maduro, King Jong
In, Vladimir Putin y otros especímenes similares.
Como la lista es tan extensa solo mencionaremos algunos
gobernantes que sobresalen por su estilo y forma de gobernar.
Donald Trump, presidente de Estados Unidos, con una
mentalidad del antiquísimo Imperio Romano, no es amigo de nadie, pero buscar
estar representado en todo.
Vladimir Putin, presidente de Rusia, la misma mentalidad
imperial, pero con un coeficiente superior a Trump. Y con amplia experiencia en
el ejercicio del poder, experto en inteligencia trasnacional.
XI Jiampin, presidente de China, pieza clave del Partido
Comunista que gobierna ese inmenso territorio habitacional de 1400 millones de
habitantes.
Ángela Merkel, Canciller alemana, veterana gobernante de
esa nación caucásica, ha sido electa en cuatro períodos consecutivos de cuatro
años, enfrenta seria dificultades, pero parece que saldrá hacia delante.
Theresa May, primera ministra del Reino Unido. Pasa por
su peor momento de su gobierno laborista, al no poder ajustar un plan realista para cerrar el
tema del Brexit.
Enmanuel Macrón, presidente francés, es un joven
gobernante que ha tenido que enfrentar serios problemas en la nación gala, pero
parece haber definido un programa de gobernabilidad que le sacaría hacia
delante en su gobierno conservador.
Pero Sánchez, jefe del gobierno español, asciende al
Palacio de la Moncloa a través de una Moción de Censura al ex presidente
Mariano Rajoy, enfrenta serias dificultades con la Comunidad Autónoma de
Cataluña, que busca su Independencia y separarse de España, esa iniciativa no
saldrá adelante, porque lacera la Constitución española, Sánchez enfrenta además la acusación de haber plagiado su tesis
doctoral, denuncia que formuló el diario español ABC.
América Latina, el
Laboratorio político regional. El continente latinoamericano marcha sin
prisa, pero sin detenerse.
Desde tiempos inmemoriales se ha dicho, que América Latina es el granero de Estados
Unidos, pero ahora debe agregársele, que también lo es, para la China continental.
La gobernabilidad en el escenario del Hemisferio
occidental se desarrolla dentro de los parámetros de la democracia
representativa, aunque sin descartar algunos intentos fallidos de colar el
socialismo comunitario.
Es el caso de Venezuela y su teoría de socialismo-bolivariano,
intentó establecerse en Bolivia, Ecuador,
Nicaragua y en la propia Venezuela, pero fracasó, el indígena boliviano Evo
Morales, es un reeleccionista consumado, pero con un sistema democrático, no socialista., o más bien
electoralista.
Rafael Correa, luego de diez años en el poder, está
siendo perseguido por asociación de malhechores y por corrupción.
Daniel Ortega, en Nicaragua, se vio obligado a establecer
una dictadura para poder mantenerse en el poder, junto a su desquiciada esposa,
que funge como vicepresidenta de la
República de Nicaragua.
Nicolás Maduro, un heredero perverso de la filosofía de Hugo Chávez Frías, condujo a Venezuela a una
crisis humanitaria sin precedente y todavía se mantiene cascareando las
bonanzas del “chavismo-bolivariano”, aunque perdió la credibilidad del sistema
desde hace un buen tiempo, y la credibilidad de su gobierno dictatorial-
El resto de América Latina y El Caribe sigue cabalgando
en la góndola de la democracia representativa, aún con sus defectos, pero
resaltando sus virtudes. Gobernantes,
como en Brasil, Argentina, Chile,
México, Colombia, Uruguay, Paraguay, los gobiernos de Centro América y El Caribe apuestan al sistema democrático
tradicional en nuestro continente. . (PNS).
No hay comentarios:
Publicar un comentario