La Columna del Editor:
¿ El rubro le tumbó el pulso a Biden y a Europa con las sanciones a Rusia?
Es aún extemporáneo para categorizar esta premisa. Pero en la medida que el tiempo avanza y Rusia sigue funcionando normalmente, pareciera que las severas sanciones económicas no van a surtir el efecto deseado y planificado por los europeos y norteamericanos.
Vladimir Putin que es un estratega y conspirador profesional dejó una carta clave en la manga de su camisa. El rubro, que era una moneda desechada y prácticamente desconocida en Occidente cobró nombradía, cuando el presidente de la Federación Rusa, V. Putin, anunció que cortaría el suministro del gas y otros combustibles a Europa y Estados Unidos y qué el quisiera comprar gas a Rusia tendría que pagarlo en rubros, la moneda local rusa.
Como vivimos en la era de la desinformación y las noticias reales no alcanzan un 50% de credibilidad, no se sabe si es propaganda del Kremlin para amortiguar los efectos negativos de la guerra en Ucrania, pero hay que poner atención lo que ocurre en el mercado financiero ruso, y si hay desasbatecimiento de las mercancías comestibles, o los bancos están cerrados, como se difundió al principio de las sanciones.
Entre las buenas intenciones y el fracaso no hay mucha distancia. Una estrategia es la que se traza en un despacho confortable, y otra, totalmente diferente es cuando se planifica para escasez en tiempos de guerra. Parece que la fuerza del rubro para el intercambio comercial con Rusia se constituyó en el arma estratégica que necesitaba Putin.
Seamos pacientes y esperemos un tiempo más real y asequible, para poder determinar si el esfuerzo de la Casa Blanca y la Unión Europea, fracasó de plano y las sanciones que siempre se han mostrado tímidas y poco resistente, funcionaron o se diluyeron en el tiempo y el espacio. De ser así el costo, que tendrán que pagar los EE. UU. Y sus aliados será demasiado alto.
Los humanos olvidamos y hasta perdonamos los errores, pero no la historia de la humanidad. Si en vez de aplicar sanciones a Rusia, cuando comenzó la guerra, le habíamos dado un susto al Kremlin, disparándoles dos o tres misiles de los que ellos disparan constantemente a la población ucraniana, la cosa fuera diferente, y no tuviéramos que presenciar esa destrucción masiva, de una nación milenaria, ni un éxodo humano de alrededor de cuatro millones, de mujeres y niños en su mayoría y jóvenes que perdieron un futuro prometedor en lar nativo.
Por último, hablemos del curso actual de la guerra. Hay un cruce de informaciones irreales que desorienta al ciudadano ucraniano, cómo al ruso, y a los recipientes de del río inagotable de las informaciones que nos bombardean a cada minuto, se habla de retira de tropas rusas, de avances ucranianos en el campo de batalla, pero no se vislumbra un alto el fuego, ni se establece una mesa de diálogo realista.
( PNS).
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