China a la vanguardia de la economía mundial

Miembros del gobierno chino en la época de Mao Tse Tung

China el gigante del Asia despertó de su  letargo económico
  Pekín, China, (Servicios de PNS)._El parlamentario francés Alain Peyrefitte, escribió en 1974 un libro referente a la China continental que tituló “Cuando China Despierte…el mundo temblará”.
 Su pronóstico visionario fue un adelanto de lo que  la China Comunista de aquel entonces, gobernada por el líder Mao Tse-Tung podría hacer para revolucionar el mundo capitalista.
  Peyrefitte que por los años de la década de los setenta era jefe de una comisión cultural parlamentaria de la Asamblea Nacional  Francesa, viajó a Pekín  acompañado de algunos funcionarios franceses sinólogos y de un grupo de periodistas que conformaban una delegación de 22 miembros.

Edificio de la Asamblea Nacional Francesa, de la que era miembro Alain Peyrefitte

  En su viaje
    El acucioso diputado francés convertido en escritor después de su misión de estudios a China que para la época contaba con 18 provincias, analizó profundamente las raíces de la Revolución china desde 1949 hasta el 1974, fecha en la que viajó a esa gran nación asiática y que todavía capitaneaba el viejo zorro político Mao Tse Tung, que murió dos años después en 1976.
  El parlamentario francés fue recibido por la cúpula del gobierno en Pekín y así lo expresa en un recuento  de colaboradores para ofrecerle su agradecimiento.
 La oración que compone el título del libro   es una  profecía atribuida al Emperador Napoleón, pero  no se consigna en ningunos de sus escritos, pero se afirma que la pronunció en 1816, luego de haber leído el relato del  primer embajador del rey de Inglaterra   en China, Lord Macartney, o de su sucesor Lord Amsbrst.
  Pero no solo el Emperador francés hizo suya esta expresión profética, también la asumió Lenin, en el último texto   que escribió  el 2 de marzo de 1923 en su obra: “Menos numerosos, pero mejores”.

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  Lo que Alain Peyrefitte no percibió ni registró en su obra “Cuando China despierte…temblará el mundo”, es que todos los pronósticos que hizo se quedaron cortos.
  La China continental de hoy con cerca de 1.400 millones de habitantes es la nación de más rápido crecimiento en el mundo y su economía dejó atrás a la poderosa producción norteamericana, invirtiendo todos los papeles.
  Pekín y las principales ciudades chinas son en la actualidad modernas metrópolis con arquitectura modernista y tecnología de punta. La producción de China abastece gran parte del mercado norteamericano, a una porción del  continente europeo,  y parte del continente africano, y a muchas naciones en América Latina, como son Brasil, México, Chile, Argentina y Venezuela  que se están supliendo de productos tecnológicos de la industria china.
  Los cinco principales países latinos  que tienen excelentes relaciones de intercambio comercial con Pekín, son: Brasil, Argentina, Chile, México y Venezuela, le siguen en ese orden Ecuador y Bolivia.
  Centroamérica y el Caribe todavía no cuentan con un intercambio comercial representativo ni equitativo con China, pero sus exportaciones e importaciones registran un crecimiento aunque moderado, pero muy estable.
  En el caso de la prosperidad económica china es la nación en tiempos modernos que ha registrado el mayor crecimiento per. cápita,  con un ciclo más extendido de duración. Más de una década lleva China manejando un crecimiento económico continuo que supera al de mayor crecimiento en la esfera occidental.
  La estabilidad macroeconómica del pueblo chino se manifiesta en el bienestar de sus ciudadanos que mantienen estándares de vida muy superior al de la mayoría de sus vecinos asiáticos.

Las previsiones del FMI para el 2012 es de un crecimiento de 3 a 3.5% a nivel mundial

  China mantiene el record además de ser la única nación en el mundo que mantiene un superávit superior al total de su propio continente. A la inversa, su principal competidor, Estados Unidos,  es líder en el mayor déficit comercial y presupuestario en toda la historia de la nación norteamericana.
    China despertó y apabulló a las naciones occidentales desarrolladas en su otrora próspera economía y superó además los índices económicos del Japón y de los denominados “Tigres del Asia”, que a principios de la primera década del siglo XXI estuvieron a la cabeza de la economía asiática.
  El gobierno chino es el mayor comprador y consumidor de petróleo en el mundo, consume y compra a su vez un 50% de la producción mundial. Es el mayor suplidor de artículos terminados a los Estados Unidos y posiblemente los más de trescientos millones de estadounidenses y extranjeros residentes estén consumiendo artículos, alimentos y otras mercaderías en más de un 50% elaborado en territorio de la China Comunista, que actúa en la actualidad con filosofía y economía neocapitalista. ( PNS)@