Réquiem para la Revolución Sandinista a los 42 años de existencia

 

 Managua, Nicaragua, (PNS).__En esta  tercera semana de junio se cumplen 42 años del Movimiento Revolucionario Sandinista y se celebran sin penas ni gloria,  en la Patria del revolucionario centroamericano Augusto César Sandino.
El presidente Daniel Ortega, otrora líder revolucionario, se va convirtiendo rápidamente en un dictador similar,  a  Anastasio Somoza, a quien combatieron los sandinistas,  por sus crímenes y abusos en el poder.

Rosario Murillo, vicepresidenta de Nicaragua,

levanta el brazo junto a su esposo Daniel Ortega. 

Estos personajes encabezan la dictadura 

nicaraguense y la señora Murillo, 

se dice que ejerce el poder detrás del trono

En una aparición pública después de una ausencia de 30 días, el presidente nicaragüense, advirtió a los organismos de derechos humanos, y  a instituciones:  como la Organización de Estados Americanos ( OEA), las Naciones Unidas y la Unión Europea, que no pierdan tiempo,  enviando mensajes para que liberen a los prisioneros, son bandidos y criminales.

La democracia continental, representada por  México y Argentina, piden una condena ejemplar al régimen de Ortega, estableciendo sanciones ejemplares y retirando las ayudas actuales.
El dilema interno de Ortega es por partida doble. Por un lado aspira a un cuarto mandato, y por el otro lado enfrenta a su esposa,  Rosario Murillo (vicepresidenta), que los monaguenses la sitúan como el poder detrás del trono.
Las directrices de Ortega en los últimos tiempos aparecen confusas, dictatoriales e irracionales.
Ciertamente,  se vislumbra una presión

 extra matrimonial que opaca la goberna

bilidad del presidente constitucional.
El sandinismo aparenta estar en bancarrota, así como el resto de los movimientos revolucionarios del continente. Ortega debe estar preocupado,  porque viene en camino un paquete de sanciones que es difícil de enfrentar, sin que el régimen se vea con la soga al cuello. (PNS).