El gobierno de D. Trump trae
incertidumbre a EU y al mundo/Un análisis en la Pluma de Luis Godofredo
Pichardo
La columna del Editor del
Servicio Panamericano de Noticias
Quisiera ser optimista
al escribir este comentario, pero las perspectivas que se vislumbran y los desaciertos que comete
cada día el flamante presidente
estadounidense Donald Trump, no nos deja otro camino que pensar en lo peor.
| D. Trump en plena campaña |
Pero esa decisión
del gobierno que encabezaba Barack Obama le costó muy caro al Partido Demócrata
y al mundo civilizado. El magnate Donald Trump es, un animal político, no domesticado, engreído y apoyado por la
extrema derecha estadounidense y los grupos supremacistas blancos que abogan
por un gobierno neonazis extremista que
solo favorezca a la raza blanca.
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| El líder neo nazi y jefe del KKK apoyando a Trump |
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| Uno de los símbolos de Al Right |
| Este es Steve Bannon, el asesor presidencial . | Cuestionado por racista y por considerar a los judíos una raza inferior |
¿Trump se distancia del neonazismo? No necesariamente, contrario, a lo que Trump declaró en el NYT,
los supremacistas celebraron una cumbre en Washington, inmediatamente después
del triunfo de Trump, y al comienzo y al final del evento se saludaron con el
brazo en alto, simulando el saludo nazi.
El lema de la cumbre que se efectuó cerca de la Embajada de México en la
capital norteamericana era “ Heel Trump”, y es que aunque el nuevo presidente
norteamericano quiera negarlo, parece que es simpatizante del neo nazismo
hitleriano.
La ONU en la mira de Donald Trump. El nuevo y polémico
presidente de Norteamérica aparenta tener
en mente reformar, desaparecer o minimizar a los principales organismos
internacionales en los que Estados Unidos es el principal socio.
En más de una ocasión ha
dicho que las Naciones Unidas no desempeñan un papel vital en la humanidad y
que los contribuyentes estadounidenses invierten mucho dinero para mantener esa
alianza.
Estados Unidos paga entre el
30 y 40% del costo operacional de la ONU, y Trump quiere que los casi 200
miembros activos de la ONU paguen en proporciones
iguales. Siendo así, pienso que la ONU debía cambiar su sede para otro lugar
fuera de EE. UU., donde se le tome más en cuenta su papel pacificador en el
mundo.
La Organización del Tratado Norte (OTAN). Este organismo de carácter militar y multinacional es el
principal vapuleado por el flamante presidente Donald Trump, de él ha dicho que
es obsoleto, que no cumple la función para el que fue creado y que debe ser
reformado o en su lugar crear otro nuevo, pero más eficiente.
Incertidumbre diplomática. La llegada del nuevo presidente republicano a la Casa
Blanca crea incertidumbre, inseguridad y desconfianza. Para Trump, el único aliado bueno en la actualidad lo es Vladimir Putin,
el presidente ruso. De Rusia y su gobernante Trump asegura que buscará mejorar
las relaciones entre ambas súper potencias. Niega en todo momento que Putin
tenga conocimiento del hackeo generalizado que realizó la inteligencia rusa a
su favor y en contra de la candidata demócrata Hilary Clinton, a la que crucificaron con noticias falsas y
fraudulentas.
El acuerdo nuclear con Irán en la cuerda floja. Trump es por naturaleza un comerciante hábil, pero indelicado. Cuando de negocios se trata
el nuevo gobernante norteamericano no se les aprietan los nervios para
retorcerles el cuello a sus adversarios. Insistió en la campaña que lo lleva a
la Casa Blanca, que ese acuerdo será revisado y posiblemente eliminado.
Un armamentista en la Casa Blanca. Trump busca aumentar el poderío militar y estratégico
del ejército estadounidense en base a crear nuevos empleos fabricando bombas
nucleares y ojivas suficientes que les permitan mantener al mundo bajo amenaza.
Esa misma línea es la que
mantiene su socio moscovita Vladimir Putin, aumentar el arsenal armamentista de
todo su entorno.
Comienzo de una nueva era. No me cabe la menor duda de que con la llegada de Donald
Trump a la Casa Blanca el 20 de enero comienza una nueva era para los Estados
Unidos y para el mundo. Los próximos cuatro años estarán cargados de amenazas,
incertidumbre y falta de confianza entre los aliados de Washington y de mucho
temor para los adversarios.
Los inmigrantes indocumentados con la soga al cuello. Posiblemente el grupo más perjudicado en la
administración Trump será el que conforman los inmigrantes indocumentados,
especialmente los tienen prontuarios delictivos, esos van a tener que hilar muy
fino para mantenerse en el territorio continental. Habrá una deportación
permanente y masiva.
El muro de la discordia que divide la frontera México-americana. La relación
diplomática más candente que tendrá que enfrentar el nuevo presidente
estadounidense será la de los Estados Unidos Mexicanos, al que desde antes de
ser elegido presidente, Trurmp amenazó
con construirle un muro divisorio, el que los mexicanos tendrían que pagar en
impuestos a sus exportaciones e importaciones.
Los mexicanos
son en la actualidad el primer socio comercial de Estados Unidos y el movimiento comercial que se genera en territorio
azteca genera más de tres mil millones de dólares al año. Trump no sólo
descalifica a México como su principal socio, sino que ha dicho además, que son criminales y contrabandistas que lo
que hacen es contaminar a la sociedad estadounidense.
América Latina y El Caribe no son prioridad estadounidense. Aparentemente Estados
Unidos tiene su vista puesta en otros mercados suplidores, porque tanto la
administración saliente de Barack Obama, como la entrante, no tuvieron ni tienen planes a la vista para aumentar
el volumen de intercambio comercial, por el contrario se percibe un ausentismo
casi total.@
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