España en estado de alerta: Cuatro yihardistas detenidos en Ceuta

La Metralleta de Don Godo

Yihardismo terrorista pone a Occidente contra la pared

Por Luis Godofredo Pichardo/ Editor del Servicio Panamericano de Noticias/Revistas Nuevo Mundo & Ventana Católica

Cóctel de noticias. Hoy trato de recorrer el mundo sin dimensionar los acontecimientos, pero analizándolos a profundidad.

  3.5 millones de personas apoyaron a Francia. Los expertos en medir espacio y audiencia calcularon en 3.5 millones de personas,  los que acompañaron a Francia en su gran concentración en París, luego del atentado contra Charilie Hebdo,  en apoyo de las autoridades y el gobierno francés, después que  los criminales ataques terroristas  diezmaron el personal del semanario satírico Charlie Hebdo.

Pero puede evidenciarse que estos ataques del yihardismo y Al kaeda, no son exclusivo en contra de Francia, van dirigidos a desestabilizar a las naciones occidentales.

 

España en estado de alerta: cuatro terroristas arrestados en Ceuta

Primero fue a Francia, posteriormente a un periódico alemán, y ahora arrestan cuatro terroristas en Ceuta, España, que según las autoridades estaban listos para inmolarse atentando contra los intereses españoles. Obama lo expresó claramente en su último discurso, cuando dijo que la lucha es larga contra el gobierno islámico, pero aseguró  que al final la coalición occidental le ganará la guerra a los islámicos extremistas.

   Personalmente estoy convencido,  de que los jóvenes que actúan  en esos hechos abominables son  utilizados por  los ideólogos del terrorismo criminal islámico,  al lavarles el cerebro y convertirles en objetos suicidas,  que no les temen a la muerte, a la que van convencidos, incluso,  de cumplir una misión sagrada, patriótica y espiritual.

  El yihardismo, como les llaman los islamitas extremistas, es una nueva forma de  nazismo que aparece en el Medio Oriente para aterrorizar a los pueblos civilizados de Occidente y al mundo en todo su contexto.

Parte del operativo anti-terrorista en España este sábado 24 de enero

  Y es una teoría vieja, antigua, pero renovada,  que recuerda los tiempos bárbaros en que una Célula del Islamismo extremo  se separó del islamismo normal  y religioso y se convirtió en una cúpula guerrera que predominó en el Oriente Medio por espacio de 110 años,  destruyendo a los pueblos que no se doblegaban  a su mandato.

  Es justo separar el pensamiento islamita universal y respetar su  corriente religiosa que es  reconocida en el mundo y que cuenta con cerca de tres mil millones de seres humanos en todo el mundo. No todos los islamitas son extremistas, o  terroristas, por el contrario, se trata de una minoría (una Célula) que dirigen hombres y mujeres fanáticos  y que ofrendan sus vidas por un idealismo fatalista, en el que no les importa perder sus vidas, al contrario, la entregan llenos de felicidad, porque afirman que van derecho hacia el Paraíso donde serán recibidos por Ala, su Dios.

  En mi labor de comunicador social, es posible que no tenga capacidad para enjuiciar la posición de los grupos terroristas con justeza, pero de lo que sí estoy seguro, es que este movimiento extremista no le aporta nada al mundo civilizado y  de que sus ataques mortíferos sólo les distancian de la  civilización y comprensión humana. Como decía un profesor universitario del Sur de la Florida recientemente, a quiénes más daño le hace el terrorismo es a los musulmanes inocentes, pues en definitiva, son los que más sufren, los que pierden más vidas y los que son más odiados.

    Ojalá que esta gente recapacite y entienda,  que es una guerra desigual, la que ellos no ganarán, y que por muchos  inmolados que aporten,  el mundo civilizado no cambiará, cada ataque nuevo sirve para unificar al mundo en solidaridad con los agredidos y también para una tasa más alta  de rechazo al movimiento terrorista.

  Las ideologías políticas y religiosas han existido desde la antigüedad, pero no han triunfado nunca contra el poderío militar o económico. Donde las botas y el capitalismo se posan no hay ideología que se imponga. Ya lo hemos visto en China, en Rusia, y en los países que estuvieron bajo  la cortina de hierro y el régimen totalitarista del  comunismo,  o del socialismo marxista, esa realidad la están comprobando los yihardistas del Medio Oriente y los fanáticos aislados que le siguen en el mundo.

  Es una lucha desigual, el capitalismo compra todo, vivimos en  un mundo materialista donde  todo compra  y todo se vende. Lo mismo ocurre con el poder castrense, quien tiene las armas y la logística lleva la delantera frente al guerrero valiente,  que sólo cuenta con el pecho, o con una herramienta rudimentaria, o anticuada.

  Al final de cuenta, la victoria que se celebra es la que lleva alegría a la humanidad y satisfacción a los protagonistas que la lideran.@