La Cumbre
de Río de Janeiro un motivo de vacaciones para los ricos
Escrito por la Redacción
Internacional de PNS Noticias.Com
Río de Janeiro, Brasil, (PNS) _ Semanas antes
de que comenzara el cónclave que organizaron los jefes de Gobierno del G-20 no
se encontraban temas coincidentes para tratar en la agenda que se había
diseñado.
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| Apertura de la cumbre G-20-Río |
Y es que la brecha entre ricos y pobres se
agranda y se distancia de los problemas comunes de dos sociedades totalmente
diferentes. Los ricos o países industrializados que encabezan el pool del G-20
tienen sus problemas resueltos o muy bien focalizados.
Mientras que los países pobres, aunque muchos
están en crecimiento, tienen una cartera
de problemas por resolver que le llevaría décadas de esfuerzos e inversión.
Nadie discute que los pobres de hoy tienen menos oportunidades de resolver sus
carencias que 10 o veinte años atrás, los costos de alimentos, medicinas,
educación, salud, transporte, y empleos estables y bien remunerados están cada
vez más altos y difíciles y el dinero se
encarece.
La riqueza de las naciones pobres es
ficticia, mientras que las multinacionales globalizadas se llevan todo el
beneficio de la producción masiva con la que contribuye el obrero, el
profesional y el chiripero de la clase empobrecida.
Ese fenómeno de desigualdad, no es exclusivo de América Latina, de las
pequeñas naciones del Caribe español o anglófono. Los europeos pobres comienzan
a ser golpeados duramente por las desigualdades económicas y sociales.
En el Asia, los chinos comunistas quizá son
los que mantienen mejores niveles de distribución de la riqueza, pero la
sociedad china en la medida que avanza hacia el capitalismo inversor y
despiadado, también comienza a experimentar los rigores del impacto económico desigual
que separa a las familias, a las vecindades y al estilo tradicional que por
milenios han convivido los ciudadanos de la China continental.
De continentes hambrientos y miserables como
el África, gran parte del Medio Oriente, de naciones como La India, Pakistán,
Afganistán, algunos países del entorno ruso, es mejor ni incluirlos en las
estadísticas económicas que cotidianamente reportan las agencias
internacionales.
¿Qué puede discutirse en Río, que ya no se
conozca y que esté a la espera de solución?
Los burócratas económicos de las naciones
ricas se siguen dando el lujo de vacacional con el dinero de los contribuyentes
pobres. Por ejemplo, el empleo de
ministro de economía, o ministro de relaciones exteriores, son cargos muy
relevantes, sin cumplieran con su objetivo fundamental, buscando soluciones
económicas viables y rentables, y resolviendo conflictos bilaterales que a
veces retardan la solución de problemas elementales que por la vagancia y
burocracia de los cargos o de sus representantes, nunca encuentran una solución
aceptable.
Para minimizar las soluciones que puedan
salir de ese cónclave en Brasil, sólo habría que colocar dos ejemplos en el
tapete de la opinión pública. Las donaciones que se ofrecieron a la pequeña
República de Haití, tras el devastador terremoto del 2010.
Se hicieron promesas económicas que de
haberse concretizado, la sociedad haitiana, junto a su entorno físico se había
transformado, pero todo se quedó dentro de un organigrama burocrático, en el
que nadie quiso responder ni responsabilizarse. Lo mismo está ocurriendo con la
crisis económica europea, especialmente con las naciones que tienen agua
suficiente para naufragar, como es el caso de Grecia, y España, hay promesas a
granel, lo que no se ha visto es desembolso en efectivo.
Es la misma política del G-20, antes de que
comenzara este período de vacaciones previo al verano, en Río de Janeiro, los ministros de economía
ofertaron hasta 450 mil millones de euros o dólares para paliar los efectos de
la crisis global, pero no se ha dicho que banco o bancos van desembolsar el
dinero, por cuanto tiempo harán los préstamos y cual es el plazo de devolución.
Es decir, que el coloquio del G-20 Río, no
pasará de bla, bla, bla, ni más ni menos.@ Reportaje
de PNS Noticias
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