Tribuna del Periodismo
Editor Luis Godofredo
Pichardo
Punta Catalina: El trauma
energético dominicano
El Gobierno dominicano se
comprometió a desarrollar un sistema de producción energética de bajo costo del cuál no conocía, ni conoces sus consecuencias posteriores, se
dejó asesorar y le recomendaron el carbón como combustibles rentables y no renovables.
Plnta en construcción |
La planta de carbón
gigantesca de Punta Catalina, en el municipio de Baní, que construye el Estado dominicano, en una hermosa ensenada sureña se ha convertido en un lugar ampliamente conocido en el mundo de
las finanzas internacionales y de los
inversionistas foráneos.
El mega proyecto energético, del cual el gobierno dominicano al parecer no realizó
un estudio profundo de factibilidad, financiamiento y costo para el
contribuyente dominicano, parce zozobrar
en medio de una crisis financiera gubernamental.
La banca brasileña comenzó a
financiar la cartera de préstamos de la planta de carbón Punta Catalina, como
un aporte o compromiso con la multinacional constructora Marcelo Odebrecht, que sobornó a presidentes, políticos y
empresarios en doce países para adueñarse de los contratos de construcción en
esas naciones corruptas, incluyendo uno en África y el resto en América Latina.
Bahía donde se levanta Punta Catalina |
¿En qué puede afectar a
Punta Catalina…la bancarrota de Odebrecht? Mucho. La principal fuente de
financiamiento externo provenía de la banca estatal brasileña, pero como se
rompió el noviazgo entre Odebrecht y la Banca carioca, ya el gobierno
dominicano no cuenta con ese soporte.
¿Si es tan bueno el proyecto
energético de la planta de Punta Catalina, como lo plantea el Gobierno
dominicano, porqué la banca
estadounidense, asiática o europea no le provee financiamiento?
Muy sencilla, la respuesta.
No quieren ofrecer financiamiento, porque el gobierno dominicano, no tiene las cuentas claras para las fechas de
pago, es decir, que el Estado solo cuenta con los desacreditados bonos soberanos, y ellos de
por sí no constituyen una garantía para los acreedores.
La banca europea le ha
sacado el cuerpo a la petición de financiamiento que ha hecho el Estado dominicano,
porque al ritmo que marcha la
construcción no se tiene una fecha límite para que entre en operación
dicha planta, y es que la utilización de
ese combustible se considera obsoleto a nivel de producción de electricidad
y ha sido abandonado en la mayoría de
las naciones del mundo.
¿Cuál será el destino final
de Punta Catalina? Todos los indicadores se inclinan hacia un financiamiento
estatal doméstico, que tendrían que pagar los contribuyentes al Fisco y ya lo
están haciendo, pero ese desembolso es lento y la falta de energía es cada vez
mayor, el pueblo está clamando por una solución inmediata y duradera.
Si el gobierno de Danilo
Medina no puede terminar ese proyecto exitosamente, los electores les van a
pasar factura muy pronto y sus planes futuros zozobrarán para la campaña del
2020.@
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