La Metralleta de Don Godo
Sombrío panorama
latinoamericano
Por Luis Godofredo
Pichardo/Editor del Servicio Panamericano de Noticias/29-01-16
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| La bandera venezolana ondea en Coro, territorio bolivariano |
Puede ser que la intención y el ideal del
militar de carrera Chávez Frías fuera honesto y que quisieras una nación
bolivariana libre de los imperialismos, y del yugo económico extranjero, pero
la realidad de la economía mundial globalizada y de la hegemonía del poder
militar de las grandes potencias no permite tal independencia o libertad en
pleno siglo XXI, a ninguna nación por grande o pequeña que ésta sea.
Ahora,
que los gobernantes de turno en Venezuela
se ven en la antesala de la bancarrota, por la caída precipitosa de los precios de los
carburantes y sus derivados, así como otros metales que han bajado de precios en el
mercado mundial, Venezuela endeudada sin
reservas líquidas para sus compromisos internacionales y con una agricultura deficiente y con
faltantes extraordinarios para el consumo doméstico, es cuando despiertan del letargo sus
gobernantes y continúan aplicando una
demagogia que parece el tiempo se le agotó, con la cesta del barril de petróleo venezolano
por el suelo con precio de mercado que oscila entre los 20 y 25 dólares por barril, con esa carencia de
circulante ya no es posible seguir enarbolando una “ revolución idealista
fracasada”, aunque ésta lleve el etiquetamiento de la doctrina bolivariana..
Si Nicolás Maduro, su equipo de Gobierno, y el Partido en el
poder no recapitulan y llegan a un entendimiento con el Parlamento opositor,
entonces habría que esperar una ampliación y severidad de las crisis
alimentaria y de los medicamentos para la saludad de los venezolanos. La
democracia tiene sus defectos y debilidades, pero el socialismo tiene rechazo y
negatividad a largo plazo, cuando los pueblos asumen el socialismo como sistema
todo se ve de un color diferente al que permea a la sociedad a corto plazo, es el caso de
Cuba, de Venezuela, de Ecuador, de Bolivia y de algunos países anglófonos del
la región caribeña.
Puerto Rico deprimido,
endeudado y abandonado. Cuán equivocados
estuvieron los nativos puertorriqueños durante más de un siglo, llegaron a
creer, o les hicieron creer, que eran ciudadanos de primera de los Estados
Unidos, y ahora en pleno siglo XXI, se han dado cuenta de que no forman parte
integral de la sociedad norteamericana, sino, que son socios estratégicos para
las mejores conveniencias estadounidenses.
Es una lástima que los políticos, abogados y
profesores boricuas no profundizaran en el contenido del acuerdo anexionista y
colonialista del 1899 que lo unió estratégicamente a los Estados Unidos, pero
ahora se despejan las dudas sobre el contenido del acuerdo de
anexión de “ Estado Libre Asociado”, como comunicador social y analista
internacional, me llego a preguntar, porqué los negociadores de la Isla del
Encanto, fueron tan ingenuos que se
dejaron embaucar sin remedio de los negociares estadounidenses. Los cuales pusieron las estipulaciones que se les vinieron
en ganas.
¿Quién debe pagar la deuda
borincana? La lógica nos enseña que
tienen que ser las autoridades y el
Gobierno de Puerto Rico, pues fueron ellos quienes la contrajeron, pero tanto
el Gobierno borincano, como el liderazgo político de la Isla, entendían, al menos así se pensaba; que Washington debía echarle las manos y
ayudarlos. Pero tanto el gobierno federal, como el Congreso se han hecho de la
vista gorda, y hoy aparece un titular
periodístico que sugiere que el acuerdo
anexionista parece tener una cláusula que permite a Estados Unidos, ceder la Isla de Puerto Rico a otra nación, si es así, hay que concluir, que los puertorriqueños no sólo son
colonialistas, sino además esclavos de los Estados Unidos y demasiado ingenuos.
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