¿La precaria economía
parroquial de la Iglesia católica y
otras denominaciones es real o ficticia?
No resulta fácil hacer una
evaluación real, de las finanzas de la Iglesia católica, como tampoco, lo es para las Iglesias o religiones
separadas. La estructura de la Iglesia católica es, como la de un Ejército Militar, con un
organigrama que encabeza el Papa, desde el
Vaticano en Roma
Pero es el mismo método que
utilizan las otras Iglesias o religiones en materia del mando escalonado y de
nivel ejecutivo. En la católica, el
gobierno vaticano posee el mando y es quién nombra y destituye, a sus prelados y funcionarios.
En las otras denominaciones
no se conoce su estructura a nivel público, porque sus respectivas
administraciones se manejan como feudos
personales privados, y su membrecía no
la cuestiona por respeto a los jefes jerárquicos y porque serían amonestados y
expulsados públicamente.
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El propósito de este artículo
no es el de cuestionar como se recoge el dinero de las Iglesias y religiones,
cómo se distribuye, o en qué manos
quedan finalmente, porque se conoce ampliamente, sobre la riqueza material del
catolicismo, y la cultura milenaria del cristianismo, se basa en que los bienes de la institución son un patrimonio
de la Iglesia universal, aunque se sabe, que muchos “ cimarrones”, dentro de la
jerarquía eclesiástica se han hecho
multimillonarios, con las donaciones de
la feligresía laica.
El papa Francisco con los cardenales del Sínodo |
Pero en las otras
denominaciones religiosas, se utilizan las mismas prácticas dolosas, con otros
nombres y con otros objetivos. El coreano Sun Moon, que fundó y dirigía
Iglesia, su organización religiosa llegó
a amasar una fortuna personal que sobre pasó de los 7.000 millones de dólares.
Otros pastores y
predicadores han sido encausados y han tenido que cumplir largas penas por
usufructo del dinero de los contribuyentes.
Pero quiero enfocarme en el tema principal de este artículo, en el ámbito del mundo católico, hay diseminadas millares y millares de
parroquias e iglesias locales que pertenecen al cordón umbilical de la pobreza,
y dependen en un ciento por ciento, de
las contribuciones locales de sus parroquianos y de las donaciones privadas.
En la cuarentena actual del 2020 causada por la pandemia del covid 19,
las arcas de las iglesias locales se vaciaron inmediatamente, porque en
realidad no estaban llenas, y muchas de las iglesias locales endeudadas.
Como no hay Homilías
presenciales, ni asistencia personal a los templos, de feligreses, de sacerdotes, diáconos, coristas, y servidores
de las parroquias (Un reducido grupo de colaboradores asiste al sacerdote)
están sufriendo una carencia increíble, podría ser incluso que muchos de estos
servidores en Cristo, estén pasando hambre y otras vicisitudes.
Antes el impacto de la crisis actual, los
Estados y el Vaticano debían llegar a un acuerdo que permita establecer un
salario justo a los sacerdotes y servidores cercanos, con los mismos fondos que
aportan los parroquianos y los contribuyentes, los seguidores del cristianismo,
católicos o de otras denominaciones, también son consumidores y contribuyentes al
fisco nacional de cada país o región. ( pnsnoticias@gmail.com).
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