La Columna de Luis Godofredo Pichardo/Editor de PNS Noticias.Com Periodismo. Publicidad y Mercadotecnia.

El periodismo que permite difundir el pensamiento y los hechos del comunicador social

Periodismo. Publicidad y Mercadotecnia. Aunque tengo 58 años de trayectoria periodística, aparezco como un lego, antes los planteamientos,  que formula un colega que lleva décadas también emborronando cuartillas,  con nuestro oficio de “ escribidor”.

El colega en cuestión, enamorado del periodismo humanitario, comunitario y altruista,  asegura sus 78 que a él le interesa seguir haciendo un periodismo humanitario, aunque éste tenga que conseguir sus seguidores en los barrios marginados y de la clase más empobrecida y paupérrima de la fauna de lectores, escuchas y seguidores que nos gastamos en el primer tercio del siglo 21.

Siguiendo esta tónica,  me revelaba de bajo de una mata de mango,  donde me refugio en el verano, especialmente en el candente verano 2019, que el dinero no es lo más importante en la profesión, del periodista, el colega es mercadólogo, aunque no ejerce ese oficio, muy buen amigo mío por cierto, ….prefiere una audiencia ….cautiva… de barrios marginados como Cienfuegos, y Pueblo Nuevo, en Santiago.

Un desenfoque total. A partir de aquí,  comienza lo que yo llamaría “divagaciones periodísticas”.

En primer lugar, quién le dijo a mi amigo,  el “mercadólogo”, que el público de Pueblo Nuevo, en Santiago de los Caballeros,  es similar al de Cienfuegos.

Habría que ser muy iluso para comparar, a los habitantes de Pueblo Nuevo, con los de Cienfuegos, uno de los primeros barrios de la ciudad de Santiago, con una  clase media que promedia más del 50% de sus pobladores, en ese nivel económico, mientras el otro escenario, es paupérrimo en su mayoría.

 Pueblo lo Nuevo es de hecho,  en  su  vivencia y el bienestar,  uno de los viejos barrios santiaguense, que más ha prosperado, aunque todavía se mantengan las  viejas  y destartaladas viviendas del pasado. El comercio, la ubicación, la historia y su pasado son parte del activo que mantiene Pueblo Nuevo en el desarrollo de Santiago.

Altruismo periodístico. Vamos a sopesar el pensamiento actual del colega en cuestión, que actualmente  produce un programa vespertino de TV, en uno de los canales de locales, un  tanto arrabal izado.

Pero como su mueva  línea periodística, es altruista, comunitaria y cooperante, no tiene nada de raro, que haga comparaciones que no respondan a la realidad.

¿Periodista, mercadólogo, o un san Martín de Porres? En cualquiera que sea la línea que adopte al final del trayecto, recibirá muchas  satisfacciones personales, y quizás, un pergamino,  de reconocimiento de los moradores de Cienfuegos, aunque me parece que los moradores de Cienfuegos  no están enterados de que cuentan con un nuevo benefactor, y filántropo.

Profesiones que se olvidan. Ya escribí más arriba, que mi amigo, es mercadólogo graduado, pero inexplicamente,  nunca ejerció el segundo oficio, el primero es,  de comunicador, y el segundo se fundamenta en el mercadeo de toda clase de mercancía, incluyendo las finanzas, pero esa profesión tiene una alta dosis de sociología, y parece que ahí es donde la puerca retuerce el rabo...

Periodismo humanitario y barrial. Un nuevo estilo, un  concepto diferente, se aparta de lo “clásico”, pero también,  de lo tradicional.

El mercadólogo amigo mío, descubre ahora, que los jóvenes milenials,  prospectos del periodismo digital y cibernético, no necesitan de la experiencia del periodismo tradicional, que sirvió  a nivel de comunicación a tres a tres ciclos de la historia de la humanidad.

El periodismo difundido por anunciantes “voceadores “comunitarios, por mercaderes y por libros  manuscritos, que sirvieron como soporte de la información en la era Primitiva, la  Agrícola, y la Industrial. También, en la época de las haciendas agrícolas y ganaderas, es decir, en la época de los hateros, y más tarde en la  industrial.

Pero como los nuevos comunicadores son autómatas y no importa la calidad de su  trabajo que realice, nadie lo corrige, lo enmienda o lo rechaza, porque hasta los correctores periodísticos,  han desaparecido, ciertamente,  hay que coincidir con nuestro mercadólogo, cuando afirma,  que la pléyades de nuevos comunicadores no necesitan la experiencia del pasado. (PNS).