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jueves, 19 de abril de 2018

LA República Dominicana no maneja correctamente el éxodo inmigratorio haitiano. PNS Noticias. Com lo analiza en el presente reportaje


¿Será una imposición… o quizás un mandato imperial la carga social que soporta la RD de parte de Haití?
Por Luis Godofredo Pichardo/Editor de PNS Noticias.Com
Una invasión pacífica. La inmigración haitiana viene de lejos y tiene su aposento trasero o delantero en  el territorio dominicano. Parece que el problema nace con la Independencia haitiana.
La isla que antes se conocía con el nombre de   la Española o Hispaniola  y que se divide en dos territorios, siendo el de Haití, el más pequeño  con 27,750 kilómetros cuadrados, y con una densidad poblacional que para el 2010 se establecía en algo más de nueve millones. Lo que obliga a  suponer que ocho años más tarde haya crecido en un 4 0 5% y que se ubique cercano a los once millones de habitantes.
La República Dominicana, ocupa un aérea territorial de 48 mil kilómetros cuadrados y unos diez millones de habitantes. Un detalle importante, si la Isla en su conjunto tiene una densidad territorial de 77, 914 kilómetros cuadrados, entonces faltan algo más de 2 mil kilómetros, en el entendido, de que la sumatoria en conjunto de 48 mil y 27 mil 750, suman 75, 750.
Resultado de imagen para grupos de haitianos pasando por la frontera
Ciudadanos de Haití a la esperar
 de entrar al territorio dominicano
Los haitianos cifran su porvenir
 en el trabajo que encuentren en RD
¿Invasión pacífica  o  unidad inducida? Ahora ocupémonos del tema que nos interesa. En los últimos 50 años se ha producido un éxodo de ciudadanos y ciudadanas haitianos que rebosa la capacidad hospitalaria con que cuenta la República Dominicana.
 Para albergar a tantas gentes empobrecidas entre las que figuran familias enteras, especialmente parturientas y enfermos que vienen en busca de servicios médicos hospitalarios, porque no se les cobran cuotas por servicios prestados, el gobierno dominicano no está obligado a cargar con ese fardo económico,  ni los contribuyentes tampoco.
Es una crisis que el Estado dominicano tiene que resolver y exponerles bien claro al gobierno de Puerto Príncipe, que esa es una responsabilidad del Estado haitiano y que los dominicanos no tenemos obligatoriedad ni deseamos asumirlas en tal sentido.
Es un abuso obligar a los contribuyentes a que paguen las enfermedades de los haitianos, y sus necesidades básicas. El pueblo de Haití tiene que emprender su desarrollo y aprender a cargar con su responsabilidad.
Si la clase política, económica y social haitiana no carga con la responsabilidad de sus conciudadanos que clausuren su país y que se diseminen por otros lares, porque en República Dominicana no estamos obligados, ni queremos asumir esa responsabilidad, aunque mantenemos, la política de buena vecindad.
¿Cuántos haitianos están subsidiados en RD? Medio millón, quizás el número es mayor. Determinar la cantidad exacta de los inmigrantes haitianos que viven en territorio dominicano, en este momento resulta imposible. Habría que organizar un Censo y buscar a los escurridizos vecinos en todos  los lugares posibles. El inmigrante en general aprende a buscar su propio escondite, pero los haitianos son expertos en la búsqueda de sus escondrijos.
El gobierno nacional, la prensa dominicana, y las instituciones benéficas calculan entre 500 mil y 800 mil los haitianos aposentados en el territorio dominicano.
Una reciente encuesta del Ministerio de Economía asegura que el 87.2% de todos los extranjeros residentes en RD son originarios de Haití. Y que un 76.4% trabajan en la agropecuaria, la construcción y comercio.
Si esta población de más de medio millón inmigrantes,  fuera contribuyente al fisco dominicano, si  además pagaran por los servicios de salud que reciben, si las parturientas pagaran por alumbrar a sus hijos territorio dominicano, como deben hacerlo en otros países, entonces la carga no sería tan pesada para el Estado dominicano.
Dicen que para muestra basta un botón.
 Esta escena de las parturientas haitianas
 en RD ilustra nuestra historia
Sin documento de identificación no hay servicios. Una  queja que se está generalizando por todo el territorio dominicano, el contribuyente nacional, reclama que se atienda primero a los nacionales  dominicanos que son quienes pagan todos los servicios con sus impuestos  y que posteriormente se atienda a los residentes extranjeros. Es un reclamo justo, no es posible que no haya medicina y hospitales disponibles para los dominicanos, pero sí que se ofrezcan todos los servicios a los haitianos.
El Estado dominicano debe establecer en lo inmediato dos requisitos válidos para recibir los beneficios del Estado a los residentes extranjeros. Primero,  que todo el que reciba un servicio lo pague, como lo están haciendo los ciudadanos dominicanos a través de las aseguradoras y en los centros médicos privados.
Como el material gastable que suministra el sistema de salud a los hospitales lo consumen los ciudadanos haitianos, no alcanza para ofrecer servicios eficientes a los nacionales dominicanos. En los hospitales públicos muchas veces hay que comprar fuera del hospital  hasta la gaza con que se va a curar una herida, eso no es posible.
El segundo requisito, es que ningún extranjero que no tenga documentos de identificación pueda recibir los servicios que ofrece el Estado dominicano a sus ciudadanos de origen.
Pudimos  contactar  antes de escribir este reportaje en un consultorio barrial de la ciudad de Santiago, que el 80% de los que recibían atención médica eran oriundos de Haití, buscaban entre otras cosas la vacuna contra la difteria, y toda clase de medicinas gratuitas..
Observamos que  se devolvió a una pareja porque no tenía documentación. El Sistema Nacional de Salud parece que comienza a incentivar la presencia de documentos a los extranjeros para que puedan recibir atenciones médicas. Esa es una posición correcta, presentar  sus documentos y pagar la consulta.
El gobierno haitiano está tan acostumbrado a que en RD se le provea todo a sus ciudadanos que envían a las parturientas un día antes del alumbramiento, aquí se le costea el parto, se le asiste después del parto y se le provee de una nacionalidad a una criatura que viene a República Dominicana 24 horas antes de nacer.
Parece que en Haití siguen soñando   con una fusión territorial, política imperial promovida supuestamente, por naciones como Estados Unidos, Canadá y Francia,  no hay pruebas fehacientes de que sea así, pero los pro-nacionalistas dominicanos  así  lo plantean. ( PNS).

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