PNS es un portal de noticias global plural, no neutral. Servimos al periodismo universal

Somos una entidad periodística universal a través de las redes sociales de la Internet. Servimos un periodismo plural, no neutral, desde enero de 1970, cuando fundamos el Servicio Panamericano de Noticias ( Panamerican News Service), y mantuvimos un equilibrio en la distribución de las noticias impresas, hasta que llegó la era de la informática y lo transformó todo en materia de información periodística.
Gracias a las herramientas que nos ofrece el periodismo virtual y digital, hoy podemos llegar a todos los rincones del mundo.
Aprovechamos la ocasión para saludar y agradecer a nuestros lectores que han depositado su confianza en nuestra iniciativa periodística global.

Con agradecimiento:
Luis Godofredo Pichardo
Fundador y director ejecutivo

domingo, 23 de octubre de 2016

Periodismo cubano del siglo XXI busca nuevos horizontes



Columna: La Pluma de Godofredo
Por Luis Godofredo Pichardo/ Editor del Servicio Panamericano de Noticias
Periodismo cubano del siglo XXI busca nuevos horizontes
La Noticia Somos Nosotros. Desde Santiago de Cuba nos llega una nueva modalidad periodística, es un híbrido del periodismo comunitario, rural y populista. En una palabra,  es el periodismo barrial, el de los marginados que busca espacio dentro de la sociedad globalizada.
La periodista cubana Reilys Griñán está ofreciendo un círculo conferencias o conversatorios acerca del periodismo digital-documental,  sobre  sus trayectorias, especialmente,  de su futuro en el transcurso del presente siglo XXI.
En esta imagen de archivo, aparece la periodista y profesora Reilys Griñán García. segunda desde la izquierda, en una convocatoria de Oye Mi Canto, concurso que se populariza en Cuba y que tuvo su origen en Santiago de Cuba, la señorita Griñán García disertó en la filial del CDP en  Santiago de los Caballeros y las universidades WAPA y Utesa, sobre el tema : La Noticia somos nosotros
La periodista Griñan pertenece a la generación joven del periodismo socialista cubano,  controlado por el estado, ella  tiene una clara visión, de lo que representan las redes sociales y la Internet en el mundo globalizado de hoy. Aunque es de destacar, que el movimiento provincial que ella encarna le llama Glocalización.
La teoría de  la profesora Griñán, que ofrece su experiencia profesional en la Universidad Oriental de Santiago de Cuba, descansa sobre el eje de que es necesario realizar cambios profundos y terminantes en la personalidad de cada uno de nosotros, para poder determinar con exactitud, que la verdadera noticia periodística la representamos nosotros los comunicadores sociales a través de nuestras investigaciones periodísticas, sociales y científicas.
Sostiene la periodista cubana con mucha vehemencia, que si primero no producimos un cambio de actitud entre nosotros mismos,  nunca llegaremos a encontrar la sapiencia necesaria para enrumbarnos hacia la modernización tecnológica,  que supone la era de la informática con sus reformas e inventos continuos  que evolucionan el pensamiento cotidiano de cada uno de nosotros.
Comparto el esfuerzo de la periodista Griñán, pero para aplicarlo en Cuba,  que telecomunicaciones son un patrimonio del Estado, donde todo responde a un orden oficial estricto, pero en una sociedad de consumo como la dominicana y la el resto del continente latinoamericano es imposible avanzar en estos tiempos con ideas arcaicas y  con un periodismo artesanal.
Los medios de comunicación latinoamericanos, del Caribe, y del resto del mundo pertenecen a entidades multinacionales, empresariales locales, o a individuos capitalistas que solo entienden de pérdidas y ganancias. Al inversor periodístico de hoy le importa muy poca la calidad o la seriedad del producto que ayudan a elaborar con su dinero, porque con  su inversión buscan multiplicar sus ganancias y no producir un periodismo serio, independiente y comprometido con los intereses de las grandes mayorías.
Reconozco  el  esfuerzo del equipo que trabaja junto a  la maestra Griñán, pero en una sociedad consumista, (aunque no capitalista) como la dominicana, el periodismo documental no tienen mucha cabida en los sectores inversionistas.
 La televisión dominicana no es educativa, sino comercial y vulgarizada, manejada en su casi totalidad  por empresarios y  comerciantes que desconocen por completo el concepto del periodismo comunitario o populista. Y la televisión de los “programeros” que en su gran mayoría son gente improvisada y analfabetos del idioma castellano, son  verdaderos apátridas de la buena comunicación social.
 Actualmente a los programeros de televisión y radio se les llama “bocinas”, porque en su gran mayoría están al servicio del Estado o de intereses particulares que lo manejan como marionetas a favor de sus intereses políticos o económicos.
De todo un poco. Sorprendente el discurso altisonante del periodista Adriano de la Rosa, que despotricó a las redes sociales y a sus usuarios, frente a la charlista cubana, advirtiéndoles que ella no conocía la perversidad de esos nuevos medios de comunicación, pero que son malignos y perversos.
El problema es que Adriano,  es  que analfabeta de la era de la informática, todavía no aprendió a navegar en esos medios tan importantes en el siglo XXI, y piensa que todavía se puede peregrinar en el periodismo, como cuando él comenzó, que era un periodismo artesanal, y sin recursos. Incluso muy limitados en los medios electrónicos o televisivos, hay que recordar la precariedad de la TV análoga.
Desconocer el poder de las redes sociales y sus consecuencias mediáticas y futuras es una verdadera tragedia para el comunicador social de hoy. Actualmente el mundo descansa sobre las redes sociales y  los periodistas que se replegaron y no se actualizaron quedaron en la retaguardia.
Finalmente pienso que Reilys Griñan, está realizando un gran esfuerzo, pero su proyecto de búsqueda de socio-capital no puede encontrarlo en una nación como la dominicana, donde los medios digitales están a la orden del día y donde la presencia del Internet y las redes sociales registran un voluminoso crecimiento, hay periodistas que se rezagaron y no avanzaron, pero no es culpa del Internet,  ni de la era de la informática, tampoco  de las dinámicas redes sociales.
Perfecto Martínez sigue organizando el Club Recreativo de los periodistas
Es justo y necesario apoyar al Club Recreativo de los Periodistas de Santiago. Hay un conato de rebeldía entre los que abogan por la no inscripción, entiende un grupo considerable de periodistas, que el Club Recreativo es un patrimonio del CDP y que  como tal no es necesario pagar dos veces a una sola institución por la matrícula de membrecía.
Ciertamente, el Club Recreativo es patrimonio legítimo del CDP, pero a los miembros que pertenecemos a la filial de Santiago de los Caballeros no se nos puede olvidar,  el esfuerzo continuo de siete años de Perfecto Martínez, y un equipo eficiente que labora a su alrededor.
Es cierto, que Perfecto reclama y con razón una cuota de gobernabilidad y administración, por su condición de miembro del CDP y por ser el presidente y fundador de la organización Periodistas en Reflexión, ya que él y su equipo fueron los que gestionaron los terrenos que el Ayuntamiento de Puñal donó al CDP y en donde actualmente se levantan las instalaciones de la entidad recreativa.
Pero hay que ir más lejos aún,  fue ese equipo el que gestionó toda la estructura que se levanta en el entorno  de la institución recreativa.
Apoyemos el programa que desarrolla el Club Recreativo, o de lo contrario, el mismo se arrabal iza o desaparece, no se puede ser tan tacaño y negarse a pagar una cuota de 100 pesos mensuales, lo que garantiza a la membrecía el disfrute de todas las actividades.
 Hay que subrayar que el periodista tiene una cultura de pedigüeño bien  arraigada y que piensa que todo lo debe recibir gratuito, por ejercer un oficio por el cual se le paga y lo correcto sería que el escribidor que no se sienta satisfecho que deje el oficio y se dedique a otra actividad profesional. @

No hay comentarios:

Publicar un comentario