Panorama Internacional
Retroceso democrático
estadounidense
Los
estadounidenses con más de 200 años de democracia representativa y una
Revolución Independentista que costó millares de vidas y pérdidas materiales cuantiosas. Los
historiadores de la época de guerra de
Independencia norteamericana hablan de hasta 42 mil combatientes que perdieron
la vida, entre éstos 1423 marines y 18,500 por enfermedades, los otros en el
fragor de los combates, pero esta cifra es muy alta y por tanto no creíble.
Este conflicto que degeneró en una guerra entre Inglaterra y las 13 Colonias
originales norteamericanas entre el 1773
y 1783, terminando con la gran batalla de Yorktown, en la que los norteamericanos
derrotaron a los ingleses cerca del territorio del Canadá.
Panorama Internacional
Por Luis
Godofredo Pichardo/ Editor de Panamerican News Service
Trump utilizando su dedo acusador y Melania pensando como plagiar otra vez vez el discurso de Michelle |
Los
estadounidenses con más de 200 años de democracia representativa y una
Revolución Independentista que costó millares de vidas y pérdidas materiales cuantiosas. Los
historiadores de la época de guerra de
Independencia norteamericana hablan de hasta 42 mil combatientes que perdieron
la vida, entre éstos 1423 marines y 18,500 por enfermedades, los otros en el
fragor de los combates, pero esta cifra es muy alta y por tanto no creíble.
Este conflicto que degeneró en una guerra entre Inglaterra y las 13 Colonias
originales norteamericanas entre el 1773
y 1783, terminando con la gran batalla de Yorktown, en la que los norteamericanos
derrotaron a los ingleses cerca del territorio del Canadá.
Al año siguiente se logró un acuerdo en 1774,
cediendo al territorio canadiense una faja territorial importante que satisfizo las exigencias de Canadá y de a las Colonias norteamericanas. La Independencia
definitiva se logra dos años más tarde en 1776 y desde entonces impera la democracia
representativa que rige el sistema bipartidista que desde entonces tienen la máxima
representación electoral, Partido Demócrata (PD) y Partido Republicano ( PR).
Porqué hablo de retroceso democrático y no de
descomposición social y política. Porque la sociedad norteamericana se ha ido
polarizando en dos corrientes políticas únicas, con un sistema bipartidista y
no ejerciendo el pleno derecho que otorga la democracia representativa o
participativa.
Lo ideal, lo justo y correcto fuese que
hubiera una participación de diversos partidos y que ejerciera el poder, el que
conquistara la mayor cantidad de votos en las urnas. Pero con un sistema
bipartidista ocurre el surgimiento de dos clases privilegiadas que obligan al
resto de ciudadanos o electores a sufragar por una de las dos opciones, aunque
el elector no lo desee, y es así, como
en Estados Unidos se originó, creció y se estableció una casta privilegiada y
ultraconservadora, que encarna a la corriente política republicana.
Hablo de las estructuras, de la ideología y
de los privilegios que acumulan los líderes de ambos partidos, pero
especialmente el Partido Republicano, se ha convertido en una organización de
extrema derecha y es el hogar predilecto del grupo racista de supremacía
blanca. El liderazgo del KKK apoya al PR y a su candidato presidencial, al
igual que el resto de los extremistas de derecha y los ultraconservadores.
Incluso llegaron a crear un movimiento colateral denominado Té Party.
Es en ese mismo partido donde encontró apoyo
el magnate en bienes raíces Donald Trump, un neófito en política y un desconocido
de los electores y en menos de un año de proclamar su intención presidencial,
los ultraconservadores lo convierten en Cleveland, Ohio, en el candidato
oficial del Partido Republicano, naturalmente, luego de derrotar en las
primarias a unos contrincantes débiles de carácter y anti-populares dentro de
la misma corriente política.
Trump, anunció la noche del 21 de julio en
que concluyó la Convención demócrata, que era el candidato de la ‘Ley y el
Orden’…Criticó con vehemencia a la OTAN, diciendo que era un organismo viejo y
cansado y que no se preocupaba por darle seguridad a los miembros de su Caucus. Prometió cambiar toda la estructura
actual si llega a la Casa Blanca.
La reacción mundial a su discurso de extrema
derecha no se hizo esperar y comenzando por el presidente Barack Obama, y
recorriendo todo el liderazgo europeo recibió una andanada de críticas.
Dudo a nivel personal, que tanto la
Organización del Tratado del Atlántico Norte ( OTAN), como el Departamento de
Estado y los mandos militares estadounidenses, dejen pasar a la Casa Blanca, a
un hombre que es un torbellino en sus ideas y extremista peligroso, de llegar a
la presidencia norteamericana podríamos vernos envueltos en más de un conflicto
de proporciones globales.
Creo
que es el momento ideal para detener
este monstruo de la política, considero que como empresario exitoso tiene sus
méritos, pero como político no tiene ni una pizca de experiencia y comandar una
nación como Estados Unidos, debía ser
para líderes experimentados y con una historia creíble en materia de
administración pública.
No es lo mismo, ni siquiera parecido,
realizar una operación de bienes raíces o de casinos de juegos que sea exitosa,
a enfrentarse a la responsabilidad administrativa que conlleva la presidencia
de los Estados Unidos. @
Porqué hablo de retroceso democrático y no de
descomposición social y política. Porque la sociedad norteamericana se ha ido
polarizando en dos corrientes políticas únicas, con un sistema bipartidista y
no ejerciendo el pleno derecho que otorga la democracia representativa o
participativa.
Lo ideal, lo justo y correcto fuese que
hubiera una participación de diversos partidos y que ejerciera el poder, el que
conquistara la mayor cantidad de votos en las urnas. Pero con un sistema
bipartidista ocurre el surgimiento de dos clases privilegiadas que obligan al
resto de ciudadanos o electores a sufragar por una de las dos opciones, aunque
el elector no lo desee, y es así, como
en Estados Unidos se originó, creció y se estableció una casta privilegiada y
ultraconservadora, que encarna a la corriente política republicana.
Hablo de las estructuras, de la ideología y
de los privilegios que acumulan los líderes de ambos partidos, pero
especialmente el Partido Republicano, se ha convertido en una organización de
extrema derecha y es el hogar predilecto del grupo racista de supremacía
blanca. El liderazgo del KKK apoya al PR y a su candidato presidencial, al
igual que el resto de los extremistas de derecha y los ultraconservadores.
Incluso llegaron a crear un movimiento colateral denominado Té Party.
Es en ese mismo partido donde encontró apoyo
el magnate en bienes raíces Donald Trump, un neófito en política y un desconocido
de los electores y en menos de un año de proclamar su intención presidencial,
los ultraconservadores lo convierten en Cleveland, Ohio, en el candidato
oficial del Partido Republicano, naturalmente, luego de derrotar en las
primarias a unos contrincantes débiles de carácter y anti-populares dentro de
la misma corriente política.
Trump, anunció la noche del 21 de julio en
que concluyó la Convención demócrata, que era el candidato de la ‘Ley y el
Orden’…Criticó con vehemencia a la OTAN, diciendo que era un organismo viejo y
cansado y que no se preocupaba por darle seguridad a los miembros de su Caucus. Prometió cambiar toda la estructura
actual si llega a la Casa Blanca.
La reacción mundial a su discurso de extrema
derecha no se hizo esperar y comenzando por el presidente Barack Obama, y
recorriendo todo el liderazgo europeo recibió una andanada de críticas.
Dudo a nivel personal, que tanto la
Organización del Tratado del Atlántico Norte ( OTAN), como el Departamento de
Estado y los mandos militares estadounidenses, dejen pasar a la Casa Blanca, a
un hombre que es un torbellino en sus ideas y extremista peligroso, de llegar a
la presidencia norteamericana podríamos vernos envueltos en más de un conflicto
de proporciones globales.
Creo
que es el momento ideal para detener
este monstruo de la política, considero que como empresario exitoso tiene sus
méritos, pero como político no tiene ni una pizca de experiencia y comandar una
nación como Estados Unidos, debía ser
para líderes experimentados y con una historia creíble en materia de
administración pública.
No es lo mismo, ni siquiera parecido,
realizar una operación de bienes raíces o de casinos de juegos que sea exitosa,
a enfrentarse a la responsabilidad administrativa que conlleva la presidencia
de los Estados Unidos. @
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