A una pulgada de la muerte: El libro que publicó LRD, quien fue fundador-director de la revista La Razón

Tribuna libre del periodismo

Por Luis Godofredo Pichardo/Editor de PNS Noticias-Revistas Nuevo Mundo & Ventana Católica

Homenaje póstumo a los periodistas Luis A. Rojas Durán y Raymundo Aguiló

Los periodistas, como todos los mortales son de carne y hueso y sirven a la sociedad en su oficio de comunicadores sociales, unos comienzan en su juventud y otros cuando ya han llegado a la madurez. Pero la vocación y la tarea cotidiana del periodista es servir a la comunidad, ofreciéndoles informaciones edificantes, constructivas y veraces.

Luis Rojas Durán, ex reportero de El Caribe, El Listin Diario, trabajó en diversos medios en Nueva York y escribió un libro que tituló a una " Pulgada de la muerte" que su portada aparece en esta imagen

  Hoy me toca rendir homenaje póstumo a dos colegas y amigos, que conocí en  los años de la década de los sesenta en Nueva York, el primero Luis A. Rojas Durán, oriundo del  distrito municipal de Castillo,  provincia Duarte,  en República Dominicana. Despuntaba la década de los sesenta, cuando nos conocimos en la isla de Manhattan, en la ciudad de Nueva York, Rojas Durán, era reportero veterano, había trabajado en los diarios matutinos El Caribe y Listín Diario, en Santo Domingo. Luego,  coincidimos juntos en la redacción del desaparecido periódico El Tiempo, que se editaba en la calle 84 y la avenida Broadway, fue en ese encuentro cuando entablamos una relación de amistad.

  Desaparecido el tabloide neoyorquino, Rojas Durán fundó y dirigió hasta su muerte reciente la revista La Razón, un órgano periodístico que llenó sus expectativas como un ente político y social. Rojas Durán fue un periodista que se enmarca dentro de la ética moral, luchador incansable por una sociedad dominicana cada vez mejor y más democrática.

  Difícil, es definir el pensamiento político del periodista Rojas Durán, pues en sus editoriales y posiciones políticas, aparecía lo mismo hacia la derecha que hacia la izquierda, aunque rechazaba la doctrina castrense cuando ésta era utilizada para mancillar la democracia a través del golpe de Estado militar, también era admirador del militarismo como institución, fue miembro de las fuerzas armadas dominicanas, antes de que ejerciera el periodismo. Creo que llegó a sargento mayor.

La Razón no desaparece con la muerte de Rojas Durán

Una vista de la ciudad de los rascaielos

Un músico popular en la ciudad de Nueva Yorok

Leyenda latina en NY

 

Una escena periodística en NY

Yo soy Charlie, en homenaje a la revista humorística

Un escenario neoyorquino en Queens

Reclamando limpieza en Nueva York. Estan son algunas de las portadas que publicó La Razón, bajo la dirección del periodista Luis A. Rojas Durán

Esta dama promueve el consumo de mariguana

Más imágenes de la revista la razon de nyEl sueño perenne de Luis A. Rojas Durán fue la existencia de su revista, recuerdo todos los esfuerzos y sacrificios, primero, para dotar de equipo de redacción a la revista La Razón, luego para editarla e imprimirla, y más que todo para distribuirla,  para que este órgano llegara a las manos de los lectores. Eran tiempos de estrechez económica para los periodistas latinos en Nueva York, y aunque se editaban y publicaban muchas revistas, periódicos semanarios y hasta mensuarios, las ganancias eran pírricas.

   Soy testigo ocular de esa época de oro del periodismo latinoamericano en Nueva York, entre los años sesenta, setenta y ochentas. Fundé primero, que la Revista La Razón,  viera la luz pública, la revista Nuevo Mundo, y el Servicio Panamericano de Noticias (Panamerican News Service) y sé que significaba en esos tiempos mantener abierta una oficina de redacción y mantener la impresión a color de una revista que era prácticamente incosteable para un editor sin recursos, como éramos la mayoría.

  Reconozco y felicito a la vez la memoria del colega Durán, porque se convirtió en un símbolo del sacrificio en  la presencia de un periodismo decente, continuado e independiente, dentro de lo que le fue posible, realizó desde su tribuna un periodismo libérrimo e independiente.

  Ojalá que con la partida de Rojas no desaparezca su revista La Razón, la que le dio vida y razón de ser por casi medio siglo de existencia. Nos gustaría escuchar que algún familiar, o particular  va a seguir imprimiendo la revista y así se pueda mantener la presencia de ese noble soldado del periodismo hispanoamericano.

 Muerte de Raymundo Aguiló: un periodista que no hizo ruido

  Me dio la infausta  noticia el colega Darío Abreú, que Aguiló había muerto en Filadelfia, o quizá otro pueblo de Pensilvania, residía allí junto a su familia, desde  que se mudó del condado de El Bronx, donde vivió por muchos años.

  Raymundo Aguiló, fue un periodista de TV, es decir, camarógrafo por mucho tiempo, trabajó en Radio TV Dominicana, o la Voz de Santo Domingo, pero al llegar a Nueva York,  se unió al movimiento periodístico sindical, del cual este columnista era directivo y promotor.

  Organizamos primero la filial del Sindicato Nacional de Periodistas Profesionales (SNPP) y luego participamos de la lucha por la Colegiación. Las reuniones se hacían en mi casa los fines de semanas. Aguiló nunca faltaba a la cita y siempre abogó por la colegiación y por la mejoría económica de los periodistas dominicanos radicados en Nueva York. Como él,  decenas de colegas se unieron al movimiento, y aunque actualmente no se reconozca a muchos de ellos,  sus nombres y sus esfuerzos siguen vivos en nuestra memoria.

  Al igual que rendimos homenaje póstumo a Raymundo Aguiló y a Luis A. Rojas Durán, lo hacemos extensivo, deseándoles mucha salud y prosperidad a los  que fueron que fueron pioneros del periodismo latinoamericano, al igual que este columnista en la ciudad de Nueva York. Paz a los restos de los hermanos y colegas fallecidos,  y un abrazo fraterno para los colegas periodistas dominicanos que aún viven en Nueva York y en Estados Unidos@