Actualidad
dominicana
Reporte del Servicio
Panamericano de Noticias
Dominicanos
rechazan defensa de ex presidente Fernández
Santo Domingo, República Dominicana, (PNS)._
Con marchas, mítines y protestas de todo género millares de dominicanos
rechazaron el díscolo discurso del ex presidente Leonel Fernández, quien trató
de justificar un déficit de 187 mil millones de pesos en obras que sus tres
gobiernos realizaron desde 1996 hasta el
2012.
Esta escena es de una de las protestas callejeras |
El estilo de gobierno de Fernández, permisivo y abusivo, corrompió de tal manera a los cuerpos
legislativos y judiciales que hoy aparecen como si fueran un circo cualquiera y
en donde se negocia como en un mercado público.
Jueces, senadores y diputados se parecen más
a una red de prostitución de lujo que a tribunales y cámaras legislativas para impartir justicia, o crear
leyes y legislar sobre las existentes. Los grupos legislativos son rufianes que
venden sus servicios, o mejor dicho, su voto a cualesquier postor, o a
cualesquier delincuente.
Pero el organismo más desacreditado de los
poderes del Estado, es el Poder Ejecutivo, lo único que no se ha corrompido en
el Palacio Nacional es la estructura física de su edificio majestuoso, aunque
las garras del tiempo comienzan a ensombrecer su paisajística.
Pueblo dominicano arde de rabia e impotencia
Las protestas que se escenifican en todo el
territorio nacional, unas pacíficas, y otras degeneran en violencia son
motivadas por dos causas distintas, aunque en el fondo ambas persiguen el mismo
fin. Se protesta airadamente por el paquetazo
fiscal que encarecerá aún más la dieta de los hogares dominicanos, y la
economía del país, pero sobre todo,
porque esta imposición fiscal hará desaparecer lo poco que quedaba de la clase
media dominicana.
Leonel Fernández repartindo canongías |
Pero además al ex presidente se le hace co-responsable
del dinero que se esfumó en sus respectivas administraciones, se le atribuye
haberse enajenado millones de dólares y de pesos y de manejo irresponsable de
los fondos públicos. Análisis económicos recientes sitúan la corrupción del
gobierno pasado en más de un 80% de fondos desviados a las cuentas personales del propio
presidente, de sus principales colaboradores, o de la mayoría de sus funcionarios, de
familiares, parientes, amigos y
relacionados.
Esta historia de corrupción se asemeja mucho
al cuento de Ali Babba y sus 40 ladrones, con la diferencia, de que los personajes dominicanos son como el
ladrón con los guantes de seda de la otra historia mediática,
El doctor Leonel Fernández, y sus forajidos
son delincuentes de cuello blanco, bien preparados y hay muchos que son
leguleyos de profesión que saben
defender el patrimonio sustraído y mantener una postura de pose social de
cierta categoría.
Por ejemplo los presidentes de las cámaras
legislativas cuando están al frente de sus respectivo podium parecen gentes
decentes, sin embargo, cuantas desvergüenzas se anidan en el corazón y la
conducta de estos servidores públicos.
Pero ellos no son los únicos cínicos,
mentirosos y demagogos, el resto de las respectivas bancadas, con honrosas
excepciones son unos tipejos serviles, deshonestos e incapacitados, la mayoría, para ejercer el oficio de legislador.
Pero esa fue la casta político-social que
ayudó a estructurar el pequeño faraón, quien siendo un producto de una
barriada capitaleña marginada se ha
llegado a pensar que gobierna una dinastía desde un partido como el PLD, que
nació como un proyecto democrático y
libertario y que él ha convertido en el peor foco de corrupción que haya
conocido la nación dominicana.@
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