Mi pronóstico electoral para el 15 de mayo. La ventaja que ofrecen las encuestas al
candidato-presidente es considerable en relación al candidato opositor. Danilo
Medina que se reelige por segunda vez, cuenta con un 60%, según los resultados de diversas encuestadoras. Es
decir, si le damos credibilidad a esos sondeos, Luis Abinadel, tendría poco que
buscar en el electorado, pero…, en República Dominicana, los electores no creen
en las encuestadoras y tienen el convencimiento de que todas son tramposas.
Abinadel, cuenta con un 30% en las encuestas menos
creíbles, pero otros sondeos lo colocan entre un 40 a un 45%, el problema
consiste, en si puede remontar en apenas
dos semanas que les quedan de proselitismo. El Partido Revolucionario Moderno (PRM)
sigue trabajando para conquistar los electores indecisos que les hacen falta, pero creo que
el tiempo se agotó.
Las encuestas posicionan a Danilo...pero él no quieren que le hablen de números |
Aunque reconozco que hay una brecha
considerable, todavía pienso que Luis Abinadel puede dar una sorpresa, la que
sería muy favorable, si resultara electo, con un nuevo programa de gobierno, que
enrumbaría a la RD hacia el verdadero desarrollo y consolidaría la
democracia, eliminando de paso la plutarquía partidista que representa el
Partido de la Liberación Dominicana.
Desde el inicio de la campaña Luis Abinadel habló del derroche, la corrupción y del uso de los recursos por parte del gobierno, pero no escaló el nivel de competencia |
En cambio, el candidato oficial no sólo
recibe contribuciones privadas y a veces muy dudosas de procedencia, sino que
utiliza, con un criterio derrochador los
recursos de los contribuyentes, que los
extrae de las arcas del Estado sin ninguna restricción. Viéndolo de esa manera,
que es real y harta conocida en el
escenario político electoral dominicano, se le hace cuesta arriba, al candidato
o a los candidatos de la oposición terciar en igualdad de condiciones, con el poder del Estado, secuestrado por los
rufianes que dirigen al PLD, estructura que sostiene y mantiene la candidatura
presidencial del oficialismo.
No
confío ni creo en la democracia política de RD. Si el sistema fuera
creíble, liberal y respetuoso, le ofreciera un trato de igualdad participativa
a todos los partidos políticos del sistema, pero no es así. El privilegio
irritante y abusivo aflora, desde las
escalinatas del palacio nacional, sede del ejecutivo presidencial dominicano, y
desde allí, se manipula y roba el dinero
de los contribuyentes para emplearlos en gastos de campaña o invertirlos en
bienes personales.
Lo correcto sería
que se prohíba terminantemente la
costumbre de manipulación y latrocinio público, al menos, cuando se está ventilando un proceso
electoral. En un sistema político corrompido como el que prevalece en RD, es un
verdadero milagro, cuando un candidato opositor gana unas elecciones presidenciales.
Reconozco,
la difícil situación del PRM y de su candidato presidencial, Luis Abinadel,
pero sigo apostando al cambio, y todavía abrigo las esperanzas de que se puede ganar, los electores son
inteligentes y saben que si el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) no ha
producido un cambio profundo en el subdesarrollo del país, ya no lo van a
lograr, porque 16 años de gobernabilidad es tiempo razonable, para emprender cualquier tipo de reforma y que la misma concretice.@
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