La
metralleta de Don Godo
¿El periodismo
corporativo extingue al comunitario o convergen internamente?
Luis Godofredo
Pichardo/Editor de PNS Noticias/ Revistas Nuevo Mundo/ Ventana
Católica/Blogspot
Santiago, República Dominicana._ Interpretar
en la actualidad el papel social del periodismo es complejo y arriesgado. No
hay duda, de que el periodismo corporativo o monopólico ha ido sustituyendo
paulatinamente al periodismo comunitario, que es el ente que real y efectivamente
produce la noticia de interés social.
Pero al periodismo empresarial le importa
poco lo que piense la comunidad de lectores comunitarios. Los empresarios
sustentan sus inversiones en la captura de un
mayor porcentaje de publicidad, o de un alto nivel de influencia
política, que se traduce a la posteridad en poder gubernamental y o/ administrativo.
Caso es de República Dominicana, aquí hay
propietarios de medios que tienen más poder que los ministros del gobierno y
una influencia ilimitada. Ese irritante privilegio le permite adquirir poder económico y político que
machas veces parece no tener límites
| Los propietarios de los periódicos impresos dominicanos ...influyentes y | ricos |
Es un fenómeno del siglo 21. Los periodistas
que tuvimos la oportunidad de trabajar en el periodismo artesanal del siglo XX,
sabemos a profundidad lo que significaba presentar un periódico elaborado y con
buena presentación antes los lectores que lo adquirían por unas míseras
monedas, que en aquella época eran significativas para el bolsillo de los lectores.
¿El periodismo corporativo es una práctica de
las naciones ricas, o del mundo globalizado?
El cambio o transformación del periodismo es
global y abarca a naciones pobres y ricas, en desarrollo y desarrolladas.
Incluso hay naciones con civilizaciones milenarias que están asombradas por la
voracidad con que actúan los capitalistas en sus inversiones en los medios de comunicación social, como lo es la televisión, la radiodifusión o el
periodismo impreso y en la última
década, que es cuando el periodismo se transforma y pasa de lo rutinario,
y a veces artesanal, al periodismo
electrónico-digital, esta última
modalidad puso en jaque mate a los inversionistas y magnates del periodismo corporativo
y lo sentó sobre una plancha caliente.
Actualmente, para que se desarrolle un medio de
comunicación social y sea exitoso debe contar con los siguientes ingredientes:
Capital sólido y suficiente de trabajo, un equipo profesional y sofisticado
electrónico satelital para distribuir rápida y eficientemente la mercancía
elaborada (la información) y contar con un equipo humano especializado en
digitación y que tengan conocimiento de los equipos y tecnologías innovadora
que diariamente salen al mercado.
Como explicábamos antes, el periodista
tradicional, ya no es necesario, y los
lectores son secundarios también, aunque su sumatoria es muy importante cuando
se trata de estudios de marketing promociónales.
¿La
profesión del periodista está amenaza o
tiene futuro a largo plazo? Habrá que esperar un poco más. De momento está
arrabalizada y prostituida. La arrabalización se observa en el poco interés que
muestran los sindicatos periodísticos por mejorar el estándar de vida de su
membresía, se anuncian planes de viviendas, programas de salud, programas de
asistencia alimenticia, pero todo se queda en el borrador de proyectos frustrados.
La realidad, es que la clase periodística mundial o
globalizada cada vez más se hunde en la miseria y la desesperación. Por un lado,
a los periodistas jóvenes y
profesionales se les trata como a esclavos al servicio de unos patrones inhumanos
que lo único que les interesa es las ganancias de sus capitales invertidos.
No es verdad, que ningún empleador
periodístico está pensando en el futuro de su empleado y sólo piensa en la
producción y calidad del trabajo del reportero o investigador periodístico.
Ese panorama, es el que tienen que enfrentar los
comunicadores jóvenes y profesionales. Para el periodista tradicional y sin
conocimiento en informática no hay cupo para él. Y en cuanto al periodista en
edad de retiro o retirado ya, para ese el Estado dispone de una pensión mensual de un dólar con veinte
centavo y para disfrutar de ella tiene que esperar que una institución amorfa
como es el Seguro Social decida cuando es que les tocan esos fondos.
En este momento hablo del SS dominicano, pero
a nivel continental es igual o peor, solamente en las naciones ricas los
periodistas pueden disfrutar de una pensión decente y con planes de viviendas y
salud.@
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